Cuando el planeta Tierra se convierte en el enemigo a vencer por la Humanidad, quedamos atrapados en una guerra ecológica que destruye los recursos naturales en nuestros territorios. Así, cada gota de sangre que carcome la semilla fértil del verdoso pasto, va dejando crecer la mala hierba que envenena los sueños orgánicos cultivados por los campesinos, y los transforma en una máquina de pesadillas para el beneficio económico de las…
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